Filtro Vivo: un descontaminante del humo en el aire a base de plantas

Filtro Vivo, es un muro verde descontaminante que no sólo atrapa las partículas del humo producto de la combustión a leña, sino a su vez recicla los residuos retenidos como nutrientes para las plantas.

Miguel Ángel Fernández junto a Gustavo Zamorano nos presentan Filtro Vivo, un innovador sistema de descontaminación natural que ha sido medido y certificado para mitigar hasta en un 95% las emisiones de material particulado, uno de los contaminantes más dañinos para la salud. Este sistema, compuesto por tótems vegetalizados, ha demostrado su capacidad para hacer desaparecer el humo, ofreciendo una solución efectiva y sostenible para mejorar la calidad del aire con 10 años de vida útil. 

Filtro Vivo ha sido especialmente diseñado para su implementación en hogares con calefactores a leña, permitiendo a los usuarios utilizar biomasa como combustible sin preocuparse por la emisión de contaminantes. Su versión habitacional brinda una instalación sencilla y amigable, ofreciendo una alternativa ecológica y responsable para aquellos que buscan reducir su huella ambiental. Asunto que se vuelve clave cuando Chile es el país con mayor tasa de mortalidad debido a contaminación ambiental en Latinoamérica. 

Este muro verde descontaminante no solo captura las partículas de humo generadas por la combustión a leña, sino que también recicla los residuos retenidos, transformándolos en nutrientes beneficiosos para las plantas. Un doble beneficio para el medio ambiente, ya que no solo se eliminan los contaminantes, sino que también se contribuye al crecimiento y bienestar de la vegetación circundante. 

Uno de los aspectos más impactantes de Filtro Vivo es su potencial para impactar positivamente la calidad del aire en áreas urbanas con problemas de contaminación atmosférica, como es el caso de Temuco y otras localidades del sur de Chile. Si este sistema fuera adoptado en todos los hogares de grandes centros urbanos con calefactores a leña, se estima que se podría reducir hasta un 85% la polución atmosférica en cada localidad, mejorando considerablemente la salud y el bienestar de sus habitantes. 

El funcionamiento del sistema es simple y eficiente. El humo de la fuente emisora es extraído en el cañón de salida del calefactor y dirigido hacia el o los tótems mediante ductos de acero. Estos tótems están recubiertos con plantas que, a través de sus raíces y un sustrato de fibras orgánicas, retienen y reciclan los contaminantes del humo, convirtiéndolos en valiosos nutrientes para su crecimiento.

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