Aprovecha al máximo las cáscaras de huevos con estos cuatro tips

Las cáscaras de huevo son muy importantes para terminar en la basura. Conoce cómo puedes aprovecharlas al máximo.

En la cocina desechamos algunas partes de los alimentos al pensar que son desechos que no vamos a poder aprovechar para nada, como es el caso de las cáscaras de huevo, pero ¿sabías que estas cuentan con múltiples propiedades?

Las cáscaras de huevo son muy importantes para terminar en la basura, ya que aparte de calcio contienen diversos minerales como estroncio, flúor, magnesio y selenio, que pueden influir en la buena salud de nuestro organismo. Pero también le podemos dar usos domésticos que van desde la belleza hasta crear productos de limpieza para el hogar. Aquí te damos cuatro consejos para poder reutilizar este elemento tan común en nuestras cocinas.

Haz tu propia mascarilla de belleza

Las cáscaras de huevo contienen muchos minerales importantes que las convierte en el ingrediente ideal para una mascarilla facial para refrescar la piel. Para la mascarilla facial, mezcla la cáscara de huevo finamente molida con un poco de clara de huevo fresca. Luego aplica la mezcla en la cara, déjala actuar y enjuaga bien la cara con agua tibia después de unos minutos.

Para este consejo recomendamos desinfectar las cáscaras hirviéndolas ya que la salmonela y las bacterias pueden adherirse a ellas. Para esto, debemos dejar las cáscaras en el agua hirviendo durante 10 minutos y luego secarlas en un horno a 100 grados por 20 minutos, de esta forma las podremos mantener en un frasco para su posterior uso.

Crea un limpiador para tu cocina

Puedes limpiar ollas, sartenes y cubiertos de acero y aluminio con las cáscaras de huevo. Para esto, sólo debes triturarlas con un poco de agua y jabón para luego enjuagar estos utensilios y eliminar los restos de comida de forma más rápida.

Las cáscaras de huevo finamente molidas producen una especie de efecto peeling y hacen que la suciedad desaparezca mejor.

Utiliza las cáscaras como fertilizante para plantas 

Puedes cuidar tus plantas de interior y exterior con un sencillo fertilizante hecho de cáscaras de huevo porque además de contener calcio, el potasio en también asegura una mejor formación de los frutos y hojas. 

Para hacer este abono, sólo es necesario moler las cáscaras de dos o tres huevos y luego añadirlas a 1 litro del agua de riego, aunque también es posible que puedes esparcir el polvo de cáscara de huevo sobre la tierra y luego regar las plantas.

Repone tus reservas de calcio

La cáscara de huevo tiene aproximadamente un 40% de calcio y cada gramo proporciona entre 381 y 401 mg. Dado que la cantidad diaria recomendada de calcio es de 1.000 mg, con solo media cáscara puedes nutrir a tu organismo y ayudar a prevenir enfermedades comunes que afectan a los huesos como la osteoporosis y la artritis.

Para esto, debes desinfectarlas como lo mencionamos anteriormente y añadir una pizca de las cáscaras muy finamente molidas a las masas, batidos y a cualquier otra preparación.

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