¿Conoces cuál es tu huella ambiental?

Descubre las emisiones de carbono que podemos reducir al cambiar nuestros hábitos.

¿Conoces realmente cuál es tu huella en este planeta? Este concepto tan utilizado en los últimos años es un indicador del impacto ambiental, que se genera desde que respiramos hasta cuando consumimos los recursos naturales del mundo, y que puede ser medible a través del dióxido de carbono (CO2) que se genera de estas acciones.

La situación de los ecosistemas marinos y terrestres, la calidad del aire, el bienestar de los bosques y la capacidad de la Tierra para regenerar estos recursos naturales dependen totalmente del impacto que las empresas y las personas realizamos en nuestro día a día.

De esta forma, la huella ecológica ha sido clasificada en dos grupos y en ambos casos, es calculada en los kilos o toneladas de CO2 que son producidas por estas actividades:

• Huella primaria directa: Es personal, se deriva de nuestro estilo de vida y el gasto en energía y transporte.
• Huella secundaria indirecta: Se da desde la producción hasta la desaparición de los bienes y servicios.

¿Quieres convertir tu impacto en la Tierra en uno positivo? Aquí te contamos cómo.

Reduce, recicla y reutiliza

Para disminuir lo más posible nuestra huella de carbono es necesario que sigamos las “Tres R” esenciales para una vida sustentable: reducir, reciclar y reutilizar. De esta forma, podemos disminuir los gases invernadero que producimos al consumir diferentes productos que van desde nuestros alimentos hasta la ropa que usamos.

Si reduces tu uso de envases y reutilizas botellas y bolsas, reduces unos 500 kg de CO2 al año. En la cocina, si compras sólo lo necesario y disminuyes el desperdicio alimentario, reduces hasta 300 kg de CO2 al año. A su vez, el impacto de la industria textil genera el 10% de los gases invernadero que contaminan nuestro planeta, por lo que la reutilización de ropa y calzado puede ayudarnos a disminuir este daño.

Transforma tu dieta

Consumir frutas y verduras es importante para nuestro organismo debido a su alto contenido en nutrientes y vitaminas que nos ayudarán a llevar una vida saludable. Pero sus beneficios van más allá de lo personal, ya que elegir una dieta en base a vegetales reduce considerablemente las emisiones de dióxido de carbono producidas por la industria de la carne, considerada la más contaminante del mundo.

Por ejemplo, un kilo de papas, que es el alimento vegetal que produce más CO2, solo contribuye con 2,9 kg de dióxido, en comparación a los 27 kg de CO2 que genera un kilo de carne de vaca. En palabras simples, si comes más vegetales, reduces hasta 1.600 kg de CO2 al año.

Cambia tu forma de transportarte

El transporte genera alrededor del 30% de la proporción anual de las emisiones totales de CO2, por lo que el coste de andar en automóvil, viajar en avión o incluso enviar encomiendas es excesivamente alto para nuestro planeta. Sin embargo, hoy en día existen diferentes alternativas que son más sencillas que optar por autos eléctricos.

Prefiriendo la bicicleta, reduces los 5.300 kg de CO2 al año que se podrían producir al transportarse en auto. Si viajas menos en avión, se disminuyen aproximadamente 2.800 kg de CO2 al año ya que este medio de transporte contribuye con el 2% de las emisiones de gases invernadero a nivel mundial. Así mismo, elegir empresas de delivery sustentables para tus compras puede ayudarte a mitigar el impacto del transporte.

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