Bosque de la Memoria: un lugar de reflexión y reconexión

Visitar el "Bosque de la Memoria" es una experiencia enriquecedora que ofrece la oportunidad de sumergirse en la historia chilena mientras se conecta con la naturaleza.

En una confluencia de memoria y naturaleza, el Centro Interactivo de los Conocimientos celebró un destacado evento de reforestación. Enmarcado en la conmemoración de medio siglo desde el Golpe de Estado, más de 100 árboles nativos se plantaron, dando origen al "Bosque de la Memoria".

Esta iniciativa, organizada por la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de la Región Metropolitana, junto con varios colaboradores, busca ser un punto de encuentro para la reflexión. Un lugar donde generaciones presentes y futuras puedan acercarse a la memoria histórica, mientras disfrutan y valoran la belleza y el poder regenerador del ecosistema natural.

Los árboles, algunos de los cuales están en peligro de extinción como el algarrobo y el belloto, se erigen como símbolos de resistencia y recuerdo. Representan el valor y la perseverancia de aquellos que lucharon por un país más justo y equitativo. Como señaló Nathalie Joignant, seremi de Agricultura, estos árboles no sólo ofrecen beneficios ecosistémicos, sino también un recordatorio constante de nuestro pasado, asegurando que los hechos oscuros de nuestra historia nunca se olviden.

El valor de este bosque no se limita solo a su simbolismo. Enrique Rivera, director ejecutivo del Centro Interactivo de los Conocimientos, subrayó la importancia educativa del proyecto. Las generaciones futuras tendrán la oportunidad de ver cómo estos árboles crecen, transformando este espacio en un lugar de aprendizaje continuo y reflexión.

Pero la memoria no solo se encuentra en la flora. Cecilia Marchant de la Red de Sitios de la Memoria, evocó la memoria de más de 300 jóvenes víctimas, subrayando la necesidad de reconocer y recordar las historias a menudo olvidadas o invisibilizadas.

Este importante proyecto se encuentra en la intersección entre ciencia, arte y naturaleza, convirtiéndose en un punto focal en la cultura chilena. Con 18 proyectos similares en la Región Metropolitana, la idea es transformar los lugares de memoria en espacios de vida y esperanza, donde el recuerdo de la tragedia se transforma en un futuro sostenible y pacífico.

La colaboración entre varias entidades, incluida la Red de Sitios de Memoria y CONAF, muestra una alianza dedicada a mantener viva la memoria. A través de estos esfuerzos conjuntos, la memoria histórica se vuelve accesible, ofreciendo a las personas la oportunidad de reflexionar sobre el pasado y mirar hacia un futuro más brillante.

Finalmente, el "Proyecto Pregunta", que invita a los visitantes a cuestionar el futuro, se añadirá a este espacio, fomentando el diálogo y la empatía. Una estrategia que busca abrir conversaciones, creando puentes entre la ciudadanía y ayudando a construir un futuro más inclusivo y reflexivo.

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