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Por Agustín de VicenteSiete ejercicios recomendados para mejorar la condición física y de salud después de los 40
Siguiendo una rutina sencilla, pero completa, se pueden mitigar los efectos del envejecimiento en el sistema musculoesquelético y tener una mejor calidad de vida.
A medida que envejecemos, nuestro cuerpo experimenta cambios naturales que pueden afectar nuestra calidad de vida. Estos incluyen la pérdida gradual de masa muscular, una mayor tendencia a acumular grasa, menor elasticidad en la piel y articulaciones, un metabolismo más lento, y una reducción en la capacidad cardiovascular y de recuperación. Sin embargo, estos cambios no son inevitables y pueden ser manejados con un estilo de vida saludable.
Sergio Salazar, kinesiólogo y académico de la Universidad Andrés Bello en Concepción, subraya la importancia de entender que estos cambios varían de persona a persona, influenciados por la genética, la salud general, y significativamente, por el estilo de vida. Mantener una rutina de actividad física equilibrada es crucial para mitigar estos efectos y preservar la funcionalidad y bienestar.
Ejercicios Recomendados
Salazar recomienda siete ejercicios esenciales que deben formar parte de la rutina diaria:
- Estiramiento Muscular General: Incluye ejercicios de estiramiento para el cuello, muñecas, hombros y columna, esenciales para mejorar la flexibilidad y reducir la rigidez.
- Fortalecimiento Muscular: Ejercicios como las sentadillas y aquellos que utilizan el peso del cuerpo ayudan a mantener la masa muscular y ósea.
- Ejercicios de Estabilidad: Practicas como el yoga mejoran la postura y reducen el riesgo de caídas.
- Ejercicios Aeróbicos: Actividades de baja o moderada intensidad, como caminar o nadar, fortalecen el sistema cardiovascular.
- Movilidad Articular: Ejercicios simples para mantener la movilidad de las articulaciones.
- Ejercicios de Respiración Consciente: Técnicas que mejoran la oxigenación del cuerpo y reducen el estrés.
- Actividad Física Regular: Elegir una actividad que sea placentera y se ajuste a las capacidades personales favorece tanto la salud física como mental.
Consejos Finales
Es fundamental que cada persona consulte con un profesional de la salud antes de comenzar cualquier rutina de ejercicios para asegurar que sea adecuada a sus necesidades y condiciones. Salazar enfatiza la importancia de convertirse en una persona activa y de escuchar al cuerpo, ajustando la intensidad de los ejercicios para evitar lesiones y garantizar un progreso seguro y gradual.
Integrar una rutina que aborde tanto la salud física como mental es clave para una vida activa y saludable más allá de los 40. Este enfoque holístico no solo mejora la calidad de vida sino que también ayuda a enfrentar de manera positiva los cambios asociados con el envejecimiento.
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