Laboratorio de innovación despliega estrategia de reforestación en Chiloé

El encuentro en el Festival Trees & Seas incluirá actividades de reforestación, limpieza de playas, educación comunitaria y restauración de suelos quemados, música patrimonial, entre otros.

La iniciativa ÜÑÜ Lab, laboratorio de innovación y sustentabilidad, junto a la fundación Plastic Oceans Chile, liderarán la segunda versión del Festival Trees & Seas. En esta edición que se realizará entre el 21 y 24 de julio, se buscará visibilizar los problemas de la Isla Grande de Chiloé, centrados en la contaminación por plástico y la pérdida del bosque nativo.

La iniciativa busca implementar una estrategia de "Compensación Ambiental" basada en la protección de la biodiversidad propia del territorio. El propósito es generar servicios ecosistémicos, aumentando la masa del bosque para que se mejore la calidad del suelo y sus capacidad para capturar agua en el contexto de la sequía que atraviesa Chile.

En esta edición, se incluirá la plantación de 15 mil árboles nativos, la reforestación de 10 hectáreas de bosque nativo, un voluntariado colectivo para la limpieza de plásticos de una playa de Ancud, el desarrollo de talleres de educación sobre plástico, entre otras actividades que se realizarán en Ancud y Castro.

Este festival busca desarrollar una cultura que se introduzca a empresas, industrias y a la sociedad civil, donde se lideren iniciativas de innovación y crecimiento para la región, a través de la transición hacia modelos más sostenibles, la vinculación con el territorio y la disminución de la huella de carbono.

Técnicas de reforestación 

La reforestación de 10 hectáreas de bosque nativo se realizará mediante la técnica speeling, en donde se utilizan plantas criadas en vivero, con una altura 30 a 40 cm y un tallo resistente, que mejora sus expectativas de desarrollo en el territorio.

Además, ÜÑÜ Lab, junto a la empresa de conservación Geosim, atenderán un problema generado a fines de 2021, fruto de un incendio urbano que afectó a la población Camilo Henríquez, quemando 150 viviendas con más de 500 damnificados. El incendio dejó 3 hectáreas de suelo muerto, terreno que perdió su capa vegetal y que demoraría 100 años en recomponerse. 

De esta forma, se restaurarán 3 mil metros cuadrados, mediante el sistema hidro-siembra, que gracias a una mezcla orgánica de agua y semillas pregerminadas, generará una alfombra de 5 a 6 centímetros de espesor, que florecerá en un plazo de 1,5 meses.

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