Gobierno brasileño anuncia medidas para la protección del medio ambiente

Estas medidas tienen como objetivo fortalecer el sistema de protección de la selva amazónica y otros biomas brasileños, reducir la deforestación y combatir el calentamiento global.

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció una serie de medidas para fortalecer el sistema de protección de la selva amazónica y demás biomas brasileños, reducir la deforestación y combatir el calentamiento global.

Junto a la ministra Marina Silva, el presidente firmó un conjunto de ocho actos que convergen en la recuperación del liderazgo de Brasil en la mitigación del cambio climático y el control de la deforestación, y afirmó que el país volverá a ser referencia mundial en sostenibilidad y enfrentamiento del cambio climático.

La ceremonia tuvo un momento emotivo de homenaje a Bruno Pereira y Dom Phillips, asesinados en la Amazonía hace un año por sus investigaciones sobre minería ilegal en el lugar. En presencia de familiares de ambos, Lula anunció el Plan de Seguridad y Soberanía de la Amazonía, cuyo objetivo es combatir delitos como la ocupación ilegal de tierras públicas, la minería ilegal, la caza y la pesca ilegales en territorios indígenas, áreas de protección ambiental y en la Amazonía en su conjunto.

"Bruno y Dom merecían y deberían estar aquí hoy, en este momento en que tendrían al gobierno brasileño como aliado y no como enemigo. La mejor manera de honrarlos es garantizar que su lucha no haya sido en vano", afirmó el presidente.

El Plan de Seguridad prevé, entre otras medidas, la implantación de la Compañía de Operaciones Ambientales de la Fuerza Nacional de Seguridad Pública; bases fluviales y terrestres integradas para el fortalecimiento de los servicios de seguridad pública en la región y modernización de la infraestructura de los organismos de seguridad pública que actúan en la Amazonía Legal.

Uno de los decretos firmados instituye el Consejo Nacional para la 30ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP-30), que tratará sobre la organización del evento que Brasil acogerá en 2025, en Belén. La capital de Pará recibirá a jefes de estado de todo el mundo para la principal conferencia de discusión sobre el clima y el medio ambiente.

CONSERVACIÓN

Los demás decretos fortalecen la protección ambiental, con iniciativas como la creación del Parque Nacional de la Sierra de Teixeira, con 61 mil hectáreas, en Paraíba; la ampliación en 1800 hectáreas de la reserva extractiva Chocoaré-Mato Grosso, una unidad de conservación en Pará; y la actualización del comité técnico de la industria de bajo carbono para la promoción de la transición del sector productivo hacia la economía de bajo carbono.

También se firmó un decreto que restablece el Comité Interministerial sobre Cambio Climático, que supervisará la implementación de acciones y políticas públicas del gobierno federal sobre la Política Nacional sobre el Cambio Climático.

Otro texto modifica la composición del comité gestor del Fondo Nacional sobre Cambio Climático, ampliando su representatividad institucional a través de una mayor participación social y ajustando los procedimientos operativos del colegiado. Un decreto más actualiza el instrumento que crea la Comisión Nacional para la Reducción de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero provenientes de la Deforestación y Degradación Forestal.

MATA ATLÁNTICA

En el conjunto de actos, el presidente sancionó un proyecto de ley que amplía los plazos para la adhesión al Programa de Regularización Ambiental y veta disposiciones que debilitaban el bioma de la Mata Atlántica.

"El medio ambiente volvió a ser una prioridad, después de cuatro años de descuido y abandono. Volvió a ser una prioridad porque la supervivencia, no solo de nuestro país, sino de nuestro planeta, depende en gran medida de cómo Brasil cuida de sus biomas, especialmente de la Amazonía", afirmó el presidente, destacando también que Brasil volvió a tener una política exterior activa y digna y a ser protagonista en las grandes discusiones sobre el cambio climático.

BOLSA VERDE

Lula y la ministra Marina Silva también indicaron el regreso de la llamada Bolsa Verde, una compensación que el gobierno paga a las familias que viven en comunidades tradicionales, en situación de vulnerabilidad social y con acciones de preservación de la naturaleza.

La ministra Silva afirmó que aproximadamente el 80% de los bosques protegidos en Brasil están bajo el dominio de estas comunidades tradicionales. "Tiene que ver con el reconocimiento de la necesidad de mantener el ecosistema preservado", afirmó.

Según Marina Silva, inicialmente 30 mil familias de la región amazónica comenzarán a recibir el beneficio, que también se destinará a comunidades de otros biomas. Estima que el número de familias provenientes de estas comunidades que dependen de actividades extractivas llegará a 100 mil.

PLAN DE PRESERVACIÓN

La ministra destacó los avances del gobierno federal en protección ambiental en 2023 y entregó al presidente el Plan de Prevención y Control de la Deforestación de la Amazonía. Según ella, todos los biomas tendrán sus planes de prevención y control de la deforestación.

"Hoy es un día para reafirmar el compromiso con la agenda ambiental, la deforestación cero, la lucha contra el cambio climático, la transición ecológica hacia un modelo de desarrollo sostenible, una política ambiental transversal y el fortalecimiento del sistema nacional de medio ambiente, incluida la reanudación de la creación de áreas protegidas", dijo la ministra.

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